Con la variedad creciente de servicios que los centros veterinarios están ofreciendo, los tamaños de plantillas que algunos hospitales ya poseen y la exigencia que los propietarios de animales de compañía actualmente demandan del veterinario hace evidente que una empresa de servicios como es una clínica veterinaria, necesite de una gestión profesional.

Desafortunadamente hasta ahora los estudios de veterinaria no incluían una asignatura que asesorase sobre gestión empresarial por lo que en la mayoría de los centros veterinarios, es el propietario o uno de los socios el que se responsabiliza de las tareas de gestión en la clínica sin una base adecuada “learning by doing” aprendiendo según vamos haciendo.

Pero o bien no es suficiente el tiempo que se destina a estas tareas o esta importantísima labor no es valorada en su medida, es muy frecuente escuchar, –el jefe por las mañanas no trabaja– o entre socios – éste ya no se pone la bata – minusvalorando esta labor.

Las responsabilidades propias de la gestión veterinaria en ocasiones no son gratas de realizar para muchos profesionales veterinarios que centraron sus estudios más en la parte científica que en la económica, son numerosos los propietarios que tratan de hacer malabares con las necesidades del paciente, del cliente y del personal al mismo tiempo, lo cual resulta imposible. De hecho es en muchos casos el propietario de la clínica veterinaria la persona menos indicada para hacer frente a los problemas de personal o recursos humanos, por lo que una vez que se reconoce que la vida es mucho más sencilla delegando estas responsabilidades en un gerente no hay vuelta atrás.

Muchos autores opinan que los veterinarios son más rentables haciendo el trabajo que dominan, la medicina veterinaria, que empleando su tiempo en labores de gestión. Si el propietario tiene tiempo libre durante el día, no habría ninguna pérdida de rendimiento, pero si el dueño tiene que renunciar a generar ingresos directos para realizar funciones de gestión, hay un coste de oportunidad real de su trabajo.

…el veterinario promedio genera aproximadamente 284 dólares por hora de trabajo como veterinario según la VHMA

La VHMA (Veterinary Hospital Managers Association) realizó en Estados Unidos un estudio con 132 clínicas veterinarias que reveló que el veterinario promedio genera aproximadamente 284 dólares por hora de trabajo como veterinario – sin embargo, puede llegar a perder casi el 90 por ciento de los ingresos por cada hora invertida en funciones de gestión.

La pérdida se calculó multiplicando la cantidad que el veterinario medio genera a la hora por el total de horas “no generadoras de ingresos” dedicadas a la gestión. Esto significa que si el veterinario promedio dedica cuatro horas semanales a las tareas de gestión, la clínica veterinaria puede perder más de 50.000 dólares en un año.